Sylvester Stallone, la icónica estrella de acción mejor conocida por sus papeles en Rocky y Rambo , recientemente fue noticia por rechazar un asombroso contrato cinematográfico de 200 millones de dólares con Disney. La decisión ha sorprendido a muchos, especialmente considerando el importante pago en juego, pero Stallone se mantiene firme en sus creencias. Según fuentes cercanas al actor, la principal razón de su rechazo fue la aceptación por parte de Disney de lo que él llama “conciencia”, específicamente la promoción por parte de la compañía de contenido LGBTQ+, incluidas las iniciativas relacionadas con el Orgullo dirigidas a audiencias más jóvenes.
En una entrevista exclusiva, Stallone reveló que tenía serias preocupaciones sobre la dirección que Disney estaba tomando con su programación. El actor expresó su fuerte desaprobación por la decisión de la compañía de integrar temas del Orgullo en su contenido dirigido a los niños. Stallone argumentó que dicho contenido, aunque bien intencionado, era inapropiado para los espectadores más jóvenes y no se alineaba con sus valores personales. “Estoy totalmente a favor del amor y la igualdad, pero creo que hay un momento y un lugar para estos temas”, afirmó. “La decisión de Disney de impulsar el contenido del Orgullo para los niños parece una extralimitación. Hay muchas otras formas de promover la diversidad y la inclusión sin centrarse en la sexualidad a una edad tan temprana”.
Los comentarios del actor reflejan una creciente división entre ciertos segmentos de Hollywood y el enfoque cada vez mayor de la industria del entretenimiento en cuestiones de inclusión y justicia social. Disney ha estado a la vanguardia de la promoción de la visibilidad LGBTQ+, particularmente a través de sus películas animadas, programas de televisión e incluso experiencias en parques temáticos. En los últimos años, la compañía ha introducido personajes e historias LGBTQ+ en su contenido, con ejemplos notables que incluyen la inclusión de una pareja de lesbianas en Frozen 2 y personajes abiertamente LGBTQ+ en programas como Star Wars: Resistance y The Owl House . Si bien estos movimientos han sido elogiados por muchos por promover la representación, también han recibido críticas de otros que sienten que dicho contenido va demasiado lejos, demasiado pronto, especialmente en el contexto del entretenimiento familiar.
Para Stallone, su rechazo al acuerdo de 200 millones de dólares es una cuestión de principios. El actor, que ha construido su carrera interpretando personajes duros e independientes que a menudo luchan contra las normas sociales, ha sido durante mucho tiempo una figura que no tiene miedo de decir lo que piensa. Su postura sobre la “conciencia social” de Disney se hace eco de críticas similares expresadas por otras celebridades en los últimos años, incluidas las del género de acción y superhéroes. Algunos sostienen que Hollywood se ha centrado cada vez más en la corrección política y que los grandes estudios, como Disney, están sacrificando la libertad creativa a favor de apaciguar ciertos movimientos sociales y políticos.
Stallone, sin embargo, no cree en la oposición abierta al cambio social. En su entrevista, enfatizó que su rechazo no se basaba en un desdén por la comunidad LGBTQ+ o sus derechos, sino más bien en su creencia en mantener el contenido infantil libre de temas adultos explícitos. “No estoy en contra del Orgullo ni de la igualdad”, explicó. “Pero cuando se trata de niños, creo que debemos tener cuidado con los mensajes que enviamos. Dejemos que los niños sean niños y permítales crecer sin estar sujetos a problemas de adultos prematuramente”.
Los comentarios del actor han provocado un debate más amplio sobre el papel del entretenimiento en la formación de los valores y creencias de las audiencias más jóvenes. Si bien Disney y otras empresas de medios han defendido sus esfuerzos por ser más inclusivas, algunos padres y críticos temen que los medios infantiles se estén politizando demasiado. Argumentan que se debería permitir que los niños disfruten de las historias y los personajes sin tener que procesar temas adultos complejos sobre la identidad y la sexualidad a una edad temprana.
La decisión de Stallone de rechazar el acuerdo se considera una decisión audaz en un panorama en el que muchos actores y cineastas se sienten presionados a adaptarse a las tendencias de la industria. Al rechazar una oferta tan lucrativa, Stallone está dejando claro que valora la integridad artística y las creencias personales por encima de las ganancias económicas.
Si bien el actor no ha descartado trabajar con otros estudios, ha dejado en claro que no cederá en sus principios. Su rechazo a la oferta de Disney sirve como un poderoso recordatorio de que, para algunos artistas, la búsqueda del éxito no es tan importante como mantenerse fiel a los propios valores. Queda por ver si esta decisión tendrá consecuencias a largo plazo para la carrera de Stallone, pero está claro que no está dispuesto a “servir a la conciencia” si eso significa comprometer sus creencias.
Esto es SATIRA, no es VERDAD