Diggy Simmons ha presentado una demanda contra Diddy, revelando alegaciones graves que podrían cambiar la percepción de la industria musical. Recordemos que Diggy, hijo de Rev Run de Run DMC, era una estrella en ascenso en el mundo del hip-hop, pero se retiró abruptamente en su apogeo.
A lo largo de su carrera, Diggy enfrentó críticas por ser un “nepo baby”, lo que afectó su salud mental y contribuyó al desarrollo de trastorno obsesivo-compulsivo (TOC). En una reciente publicación, confesó que la presión y el odio constante lo llevaron a alejarse de la música para cuidar su bienestar.
Sin embargo, la parte escalofriante de esta historia es la alegación de que Diddy habría intentado manipular y explotar a Diggy, lo que podría haber sido un factor decisivo en su retiro de la industria. Las acusaciones no se detienen ahí; se rumorea que Diddy ha estado ligado a un patrón de comportamiento inquietante hacia artistas jóvenes, una revelación que se suma a una larga lista de alegaciones en su contra.
Mientras los fiscales investigan más de 20 años de presuntas víctimas y la comunidad comienza a hablar, se revela que la sombra de Diddy es más oscura de lo que muchos imaginaban. Las redes sociales están repletas de comentarios de apoyo hacia las víctimas, clamando por justicia y demandando una exposición completa de la verdad.