Los bocetos del juicio de Sean “Diddy” Combs en el tribunal se han hecho virales, y un tuit que cuestiona la ausencia de cámaras en estas salas en pleno 2024 generó un debate. En los casos federales, las cámaras están prohibidas, y el caso de Diddy ilustra perfectamente por qué. Desde el juicio de O.J. Simpson, las autoridades han preferido los bocetos a las cámaras, protegiendo tanto la identidad del jurado como la información sensible que podría ser utilizada para liberar a personas poderosas.
El arresto y la primera audiencia de Diddy
La primera comparecencia judicial de Diddy ocurrió después de su arresto el 12 de septiembre de 2024 en el lujoso Hotel Park Hyatt de Manhattan. Apenas 24 horas después, se hizo pública la acusación que detallaba una lista extensa de cargos: tráfico sexual, crimen organizado, conspiración y transporte para ejercer la prostitución.
Ese día, una multitud, incluidos medios de comunicación y fanáticos, se reunió frente al tribunal para presenciar el momento. Sus hijos, Justin, Christian y Quincy Combs, llegaron para mostrar su apoyo, evitando responder preguntas de los periodistas. En cambio, sus hijas, adolescentes, estuvieron ausentes, algo comprensible dada su edad.
Declaraciones de inocencia y alegatos en el tribunal
En el tribunal, el abogado de Diddy, Marc Agnifilo, se declaró inocente de los cargos. Alegó que las acusaciones de tráfico sexual con su exnovia Cassie Ventura no eran más que “actividades consensuadas que duraron más de una década”. Sin embargo, la fiscal Emily A. Johnson describió a Diddy como un abusador en serie con los recursos y la disposición para eludir la justicia.
Durante un registro en la habitación del hotel de Diddy, las autoridades encontraron una sustancia pulverulenta rosa, que la fiscalía sugirió era una droga. Este hallazgo, junto con el historial de abuso de sustancias y problemas de ira de Diddy, llevó a la jueza Robin F. Tarnovsky a denegarle la libertad bajo fianza, ordenando su detención mientras continúa el juicio.
Ofrecimientos para conseguir la libertad bajo fianza
El equipo legal de Diddy no se dio por vencido. Ofreció una fianza de 50 millones de dólares, monitoreo con pruebas de drogas periódicas, detención domiciliaria en Miami y restricciones estrictas sobre las visitas. Incluso propusieron vender la casa de Miami y la de su madre para recaudar fondos. A pesar de estos esfuerzos, el juez se mantuvo firme en su decisión inicial.
Fuera del tribunal, el abogado de Diddy reafirmó su inocencia, prometiendo luchar hasta el final. Según él, Diddy viajó a Nueva York para enfrentar las acusaciones y demostrar su inocencia.
Este caso sigue siendo uno de los más comentados del año, no solo por la fama de Diddy, sino también por las revelaciones y controversias que ha desatado en la opinión pública.